EL Sukalki Eguna está marcado a fuego en el corazón de los mungiarras. Con cincuenta ediciones a sus espaldas y más de cincuenta años de historia -los más veteranos se niegan a contar las ediciones que “intentaron organizar los fascistas, los mungiarras hicimos boicot”- el último día de los Sampedros de Mungia es la perla del municipio, la niña bonita, la jornada en la que verdaderamente todos los mungiarras disfrutan de su día, de su fiesta y de su tradición.

 

El tiempo había sido la mayor preocupación de participantes y también de organizadores, Danak Bat Pelotazale Alkartea, que este año se encargó de la organización por primera vez y a quienes la lluvia no empañó este gran día: “Estamos contentos. La lluvia nos ha pillado en el momento de la entrega de cazuelas y hemos tenido que improvisar moviendo las mesas para poder realizar las catas, pero la gente ha respondido participando como cada año”, señaló Iñigo Giménez, presidente de Danak Bat Pelotazale Alkartea.

Durante toda la mañana y hasta aproximadamente las 13.00 horas la jornada transcurrió como es habitual en un Sukalki Eguna: la batalla entre cuadrillas por conseguir la leña los primeros, los más resacosos pelando patatas, los más pequeños haciendo cola en las fuentes del parque Uriguen para lavar los cacharros y algún dormilón que otro haciéndose perdonar con bandejas de pasteles y bollos recién hechos.

Así, se presentaron 238 sabrosos guisados ya bajo la incesante lluvia que amenazaba los mimados fuegos y cazuelas que más de uno y dos cubrieron con sus propios paraguas mientras les daban el “último golpe”. La cazuela ganadora fue Barazpe II, de una cuadrilla de Mungia.

LEÑA O BUTANO

Mientras, técnicos del Ayuntamiento de Mungia llevaban a cabo un sondeo que ya comenzó hace unos meses a través de la Asociación de Comerciantes y Hosteleros del municipio, y que quiso recoger la opinión de los mungiarras sobre varias cuestiones en torno al Sukalki Eguna, como la preferencia por el día de celebración del evento, la conservación del parque Uriguen y la más controvertida: leña o butano para cocinar y participar en el concurso de guisado.

Conocida es por los mungiarras y habituales del Sukalki Eguna la tendencia en los últimos años por utilizar el gas butano como medio ante el tradicional fuego de leña, y desde el Ayuntamiento han pretendido consultar a la ciudadanía para “adaptar la normativa a los nuevos tiempos y sobre todo tratar de que el concurso sea lo más justo posible para todos”.

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