Los vecinos de la localidad se volcaron ayer en sus exitosos Lore Jokoak. Escenificaron la Batalla de Mungia en la que oñacinos y gamboínos sumaron fuerzas en 1471 contra el Conde de Haro

DEIA. Si seguís peleando entre vosotros, el Conde de Haro os dará garrote", advertía el Conde de Treviño a los señores de Butroi y de Billela, banderizos oñacinos y gamboínos respectivamente, y que fueron históricamente enemigos.

Fue en 1471 cuando deciden unirse para hacer frente a ese enemigo común: el Conde de Haro, uno de los regidores de los Reyes Católicos. Ese año tuvo lugar la llamada Batalla de Mungia, en la que ambos bandos vizcaínos lucharon a una contra el de Castilla y vencieron. Ese fue el punto de inflexión en la escenificación que recrearon ayer más de cien mungiarras en una nueva y exitosa edición de sus tradicionales Lore Jokoak. De nuevo, esta cita triunfó.

La jornada comenzó alrededor de las once de la mañana en Torrebillela, bastión de uno de los jauntxos implicados en las luchas medievales entre linajes -el Señor de Billela-. Allí se congregaron mungiarras que representaban personajes de aquellos tiempos, entre ellos el alcalde de Mungia, diputados, el famoso Marquesito, todos ellos vestidos con sus mejores galas junto con el pueblo, los vizcaínos, que, habiendo luchado entre sí durante siglos, encontraron en la concordia y la unión el medio más eficaz para defender sus intereses y sus fueros ante los regidores que enviaban los Reyes Católicos.

La escenificación puso en valor la relevancia de este hito histórico. En la puesta en escena tomaron parte Mungialdeko Antzerkizale Taldea, Amilotx Dantza Taldea, JM Arregi Abesbatza y otras asociaciones y grupos del municipio, así como vecinos y vecinas de todas las edades cuya ayuda y participación desinteresada hicieron posible un año más que Mungia brillara ante toda Bizkaia: "Es admirable el trabajo y la participación de los mungiarras año tras año" comentaba Mila, componente de Mungialdeko Antzerkizale Taldea.

REGRESO AL PASADO Así, cuadrillas, familias y centenares de visitantes, vestidos para la ocasión, fueron transportados a la Edad Media entre brujas y sanatenes que, entre pócimas, ungüentos y remedios mágicos, calmaron más de un mal ayer en Foruen Enparantza. "Yo he llevado a mis hijos a sanatenesmuchas veces para curarles las anginas, y, no me digas por qué pero funciona", aseguraba una vecina, admirando las bondades de estas tradiciones curanderas.

Junto a ellas, auténticas rederas de Bermeo se acercaron a Mungia para mostrar sentadas en el suelo de la plaza, uno de los pocos oficios de aquella época que aún sigue vigente. Una familia de mungiarras, rodeada de algunos amigos contemplaba la escena mientras degustaban unos buenos talos con chorizo: "Salimos todos los años, siempre vestidos de aquella época", comentaban Martin y Miren, que acompañaban a su hija Ane y su amiga Leire, miembros ambas de Amilotx y que habían tomado parte en la escenificación de la batalla.

Otra cuadrilla de jóvenes de Mungia, también dantzaris, se arremolinaba alrededor de la txosna: "Hay siempre muy buen ambiente y todo el mundo toma parte", subrayaban.

LOS NIÑOS, PROTAGONISTAS Como no puede ser de otra manera en un día festivo, los niños fueron grandes protagonistas de la jornada de ayer, y, entre caballeros, banderizos y al son de la música de trikitilaris y txistularis se adentraron en una Edad Media colorida y llena de sabores y aromas infinitamente más dulces que los que a buen seguro padecieron los vizcainos de aquella época. Ainhoa fue una de ellas, y junto a sus tíos Joseba y Nerea y su aitite y amoma, Eugenio e Itziar, visitó cada puesto y curioseó alrededor de un pobre burro que soportó estoicamente las infinitas fotos que los más pequeños quisieron hacerse.

Tras una mañana repleta de teatro popular, los mungiarras pudieron disfrutar con los bertsos de Xabi Paia y Alaia Martin. Seguidamente, varias aves rapaces hicieron aparición en Matxin Plaza para regocijo de los allí presentes, que, admirados, contemplaron boquiabiertos la exhibición.

Al mediodía muchos mungiarras se congregaron en Olalde para dar cuenta de una comida popular. Las euskal kantak animaron la sobremesa. Los niños pudieron participar en algunos talleres de herri kirolak que se organizaron en el parque de Olalde, uno de los pocos de Bizkaia dedicados al deporte rural. Por la tarde dio comienzo una romería a la vieja usanza que quiso "recuperar la esencia de las romerías de antaño con sus valses, pasodobles, biribilketas, fandangos, etc.", tal y como apuntaron desde el Consistorio.

Las claves

· Zortzigarren edizioa. Bizkaia osoan ospea dute jada Mungian tradizio bihurtu diren Lore Jokoek, eta inguruko herrietatik nahiz Euskal Herriko hainbeste txokotatik hurbiltzen dira urtetik urtera gehiago diren bisitariak ere.

· Mungiako Bataila. 1471. urtean ganboatarrak eta oinaztiarrak batu eta Gaztelako Erreinuaren ordezkari zen Haroko Konteari aurre egin zioten Mungiako Batailan, aurtengo edizioaren ardatza.

· Mungiarrak, Lore Jokoen oinarri. Batailaren antzezpena eta antzinako ogibideen erakusketa bertako herritarren laguntza eta lanari esker antolatu zen, urtero legez.